La PANDEMIA y el Silencio

Shutterstock 659491051 Scaled 2

Para muchos, tiempos de ajuste por el encierro y la pandemia; mientras para otros, el encierro es lo menos que nos importa.  El ajuste al dolor por amor, es lo que realmente define nuestros días en medio de la pandemia.

Ahora vives tu propio ajuste, aprendes de esa nueva perspectiva de vida tras ver el mundo derrumbarse ante tus ojos. Inmediatamente, tu vida conoce el nuevo rol que juega la familia, las amistades, el trabajo, y todo cuanto te rodea. El dolor se convirtió en catalítico para encontrar el esplendor de tu esencia; la fusión de tranquilidad de vivir en armonía contigo mismo y el amor, te permiten desarrollar las fuerzas para ser resiliente y continuar siendo parte esencial de la familia.

Desde el momento que aceptas el balance entre la dimensión terrenal y la espiritual, encontrarás paz interior. Esa paz que ante los ojos del mundo, se percibe como fuerza ante el dolor de perder un hijo por suicidio. En cambio para mí, esa paz interior, es sinónimo de amor hacia mis hijos, mi familia y mis amistades. Es la urgencia de salir y ayudar a salvaguardar la felicidad de otras madres, padres, hijas e hijos.

Hoy, ya no puedo cambiar mi pasado, tan solo puedo diseñar mi nueva realidad y aceptar con gratitud la nueva misión de vida. Lloraré cuando tenga que llorar, esa cicatriz es indeleble y no desaparecerá; pero también sonreiré, cuando mi hijo Sebastian envíe señales de amor desde el cielo. No es ni será fácil, pero el amor sobrepasa cualquier obstáculo. Si bien conozco lo indescriptible de este dolor, también conozco el amor; es mi deber alertar al mundo y crear conciencia del problema que atraviesan nuestros hijos dentro de la sociedad.

La pandemia que realmente vivimos, no es el COVID-19, es el cautiverio al silencio, es ignorar el dolor por temor. El problema comienza con la endoctrinación social de vivir un problema en silencio, el reto más grande es aprender a re-aprender. Si hablar nuestros sentimientos es el mejor remedio para el dolor, la angustia y el Corazón, POR QUÉ callarlo?

No hay varita mágica para el dolor, el dolor se VIVE, el dolor se HABLA; del dolor nace la esperanza y se crea conciencia en nuestra Sociedad. Hoy le extendiendo la mano a quienes sufren en silencio un dolor emocional y busco ayudarles a encontrarse con ellos mismos. Hoy alzo la voz, para concienciar sobre el problema del acoso, ciber-acoso y el suicidio en adolescentes. Yo estoy segura que JUNTOS podemos hacer la diferencia; es momento de reaccionar y actuar, no ignores el problema.

Si te invito a cambiar el presente, crear un nuevo futuro y hacer la diferencia, me acompañas?

Con Amor, Carol Kohn